Posts matching “TRAS EL NAUFRAGIO DE “DIÁLOGOS””.

COLOQUIOS (292): «TRAS EL NAUFRAGIO DE “DIÁLOGOS” [Nº 28]». TRILOGÍA (EL LOMITO ANDINO II). Gabi Mendoza Ugalde

 
 
 

foto antigua (años 20)

La Gran Guerra
(1914-1918)
[Fuente: Fotos Antiguas de Mendoza, Argentina y el Mundo de cada década desde 1880]

 
 
 

—Sucede que derramo sobre mi pecho el contenido de la copa, por llevarla a una boca que no está donde normalmente creo tenerla.

—Ésa es una de las razones por las que no me gusta estar más de cuatro horas seguidas en la siete del Reina Sofía.

—Pasé muchos años de mi infancia, como entretenimiento y aventura de niño, recogiendo del campo los cascos de los soldados muertos en la última guerra. En una ocasión alguien, al saberlo, me preguntó si alguna vez encontré pelos pegados dentro; le contesté que los soldados se los ponían en la cabeza, no en el coño.

—Entonces, la única hipótesis plausible que veo es que todos sean calvos y ninguno se depile.

—Nunca he pensado un texto en el idioma que normalmente utilizo para vivir. Sólo quisiera escribir en las lenguas que ignoro completamente.

—Son las únicas en las que hablo.

 
 
________________
 
 
COLOQUIOS (289): «TRAS EL NAUFRAGIO DE “DIÁLOGOS” [Nº 25]». TRILOGÍA (EL LOMITO ANDINO I). Gabi Mendoza Ugalde

«TRAS EL NAUFRAGIO DE “DIÁLOGOS”»
 
 
 

COLOQUIOS (291): «TRAS EL NAUFRAGIO DE “DIÁLOGOS” [Nº 27]». Gabi Mendoza Ugalde

 
 

Rodtchenko. Poemas de Maiakovski a Lili. (1915)

Poemas de Maiakovski a Lili
(1915)
Alejandro Ródchenko
(1891-1956)

 
 

—Lo implacable es un fractal asustado.

—Lo impecable es la dictadura, un fractal es la libertad.

 
 
________________
 
 
«TRAS EL NAUFRAGIO DE “DIÁLOGOS”»
 
 

COLOQUIOS (290): «TRAS EL NAUFRAGIO DE “DIÁLOGOS” [Nº 26]». Gabi Mendoza Ugalde

 
 

Saint Moritz
Tamara de Lempicka
(1898-1980)

 
 

—Lo mejor de sí son sus protecciones. Aunque debajo del blindaje sólo encontremos un vacío enervante.

Para hacer reír no tiene quien le haga sombra. Sus maquillajes, potingues y oropel siempre le harán creer que aparece como iluminado.

—El sí es un espejismo, un efecto de máscara. Tal es así, que el hecho de que debajo de ellas encontremos el vacío no sólo me gusta, sino que me parece la mejor definición de un ser humano. Amo sus máscaras.

 
 
________________
 
 
«TRAS EL NAUFRAGIO DE “DIÁLOGOS”»
 
 

COLOQUIOS (289): «TRAS EL NAUFRAGIO DE “DIÁLOGOS” [Nº 25]». TRILOGÍA (EL LOMITO ANDINO I). Gabi Mendoza Ugalde

 
 

VIVA EL PELO. Julio Romero de Torres

Viva el pelo
Julio Romero de Torrres
(1874-1930)

 
 

—Son viejas porque parecen jóvenes. ¡Córtenles el pelo y verán lo que hay debajo!

—Posiblemente, una cantante retirada.

—Ésta llega ya con el pelo cortado. En la calva lo que vemos es una cremallera.

—Al menos, al abrirla, tendremos la seguridad de que no nos encontraremos una vieja queriendo dar a entender que está en edad fértil.

—A veces, cuando se pretenden cazar dos liebres, puede ocurrir que no sea cazada ninguna (Rf. Akira Kurosawa). Pero prefiero lo que me decías en aquella tasca, que también puede ocurrir que, aunque no sea cazada ninguna de las dos liebres, acabes cazando un conejo.

 
 

________________

 
 
«TRAS EL NAUFRAGIO DE “DIÁLOGOS”»
 
 

COLOQUIOS (288): «TRAS EL NAUFRAGIO DE “DIÁLOGOS” [Nº 24]». TRILOGÍA (CI). Gabi Mendoza Ugalde

 
 

1 Lagoa 2003

Molde de la escultura del poeta Alves Redol
en el estudio del Maestro Lagoa Henriques
[Foto: LGV. Lisboa, 2003]

 
 

—Pues aquí estamos, con la fresca.

—Porque es nueva. Mañana veremos.

—Un artista sólo pinta con el color de su ceguera.

—El color de aquello sobre lo que aún no existen sus correspondientes aguijones: el del hombre libre.

—La voz es la piel del lenguaje.

—Su temblor, a veces, la pone como el terciopelo.

 
 

________________

 
 
«TRAS EL NAUFRAGIO DE “DIÁLOGOS”»
 
 

COLOQUIOS (287): «TRAS EL NAUFRAGIO DE “DIÁLOGOS” [Nº 23]». TRILOGÍA (XCIII). Gabi Mendoza Ugalde

 
 

Resultado de imagen de Recogiendo el Centeno. Kazimir Malevich. (1912)

Recogiendo el Centeno
Kazimir Malevich
(1878-1935)

 
 

—Envidia el manco la soriasis del jornalero.

—Si la sarna no es con gusto, el jornalero al manco.

—Tráeme inmediatamente unas zapatillas, me dijo el pie del verso.

—Versos nómadas, cuyos pies hinchados aconsejan descalzarse las botas en la fonda donde pernoctan.

—En la Feria de Recoletos me compré unas gafas de viejo.

—Sí, para que no nos engañen los libros nuevos.

 
 

________________
 
 
«TRAS EL NAUFRAGIO DE “DIÁLOGOS”»
 
 

COLOQUIOS (286): «TRAS EL NAUFRAGIO DE “DIÁLOGOS” [Nº 22]». LA ALCARRIA VI. Gabi Mendoza Ugalde

 
 

aguilar2013M.VERPI 5

Plaza octogonal
[Foto: Manuel Verpi (Aguilar, 2013)]

 
 

A María Antonia López-Berrio

 
 

—Ocurre con frecuencia que una colonia abandone su casa y llegue hasta el bosque donde se aloja en cualquier árbol hueco. Éste es sólo la protección externa de un hogar, mientras su estructura interna, no menos compleja, es obra de ellas mismas.

Semejante a la composición química de la grasa; las abejas segregan la cera con la parte inferior del abdomen que, en pequeñas escamas toman con sus patas y atenazan con su boca formando los pequeños sillares de una construcción que avanza desde arriba hacia abajo.

Del paralelo 40º 14´47″ al 37º 30´53″. En el siglo diecinueve, Juan Vicente Gutiérrez de Salamanca construye a la inversa su plaza. Lo cercano aproxima lo lejano.

—Somos árboles. Nuestras raíces existen. Pero al tener manos inventamos el hacha. La Historia podría ser también el relato sin fin de un radicidio continuo, en todo lugar y momento, por todos, con ocasión, unas veces de la necesidad y otras, demasiadas, de la locura.

Somos, por tanto, bosques nómadas y los otros. Somos lo previo, lo externo, y las abejas, cada una de ellas y la colonia misma.

También el aire, el peralte, la ascensión, unos caballos o un lago.

Quien desde la altura puede, porque debe, alcanzar la bajura, humano es y así va preparándose, con disciplina vieja, a sobrevivir también en la desconcertada orientación que supondrá la vida cuando nos hayamos muerto.

Que lo abierto nos recluya. En Ti confío.

 
 
________________
 
 
«TRAS EL NAUFRAGIO DE “DIÁLOGOS”»
 
 

COLOQUIOS (285): «TRAS EL NAUFRAGIO DE “DIÁLOGOS” [Nº 21]». Gabi Mendoza Ugalde

 
 

Luz del sol
Vilhelm Hammershøi
(1864-1916)

 
 

—Mi casa (comento a A. enfadado), es un convento castellano en el centro de Andalucía. Y ahí está mi puto escudo que la defiende.

—¡Ay del día en que el centro de Andalucía no lo ocupe un convento castellano!
 
 
________________
 
 
«TRAS EL NAUFRAGIO DE “DIÁLOGOS”»
 
 

COLOQUIOS (284): «TRAS EL NAUFRAGIO DE “DIÁLOGOS” [Nº 20]». LA ALCARRIA V. Gabi Mendoza Ugalde

 
Rota 2010 LGV 1

[Foto: LGV Rota 2010]

 

—A menudo, cerca del Colmenar, mientras paseo, previsibles e inesperadas, las veo posarse en romero, espliego, tomillo, genista, o ajedrea.

   Bola de masa, su miel es mejor y más homogénea cuanto más brownianos y diferenciados son sus deambulares. Lo diverso construye lo global.

—De las cimas parten los orígenes de las vertientes. Fuente de fuentes, a veces, no sólo marchan a conquistar las superficies sino también las entrañas de los macizos montañosos. Lo diverso sería lo que brota, se derrama, fluye, mana…, por fuera o por dentro; y el mar su construcción.

 

________________
 
«TRAS EL NAUFRAGIO DE “DIÁLOGOS”»

 

COLOQUIOS (283): «TRAS EL NAUFRAGIO DE “DIÁLOGOS” [Nº 19]». LA ALCARRIA IV. Gabi Mendoza Ugalde

 

porGandul12042014ODP 1

Flor en Gandul

[Foto: ODP 2014]

 

—Derivadas de aquellas otras que al principio del XVI plantase Luis Hurtado de Mendoza, crecen flores de azafrán silvestre aquí también llamadas de no merendar, que en noviembre, son mecidas por un viento húmedo y frío. Código que sólo ahora nosotros comenzamos a descifrar.

   Tejido o texto. A unos pequeños pétalos, en el camino de la Calera, la brisa anuncia el un
iverso.

—Sólo a lo pequeño puede allegar lo grande.

   Juntarlo en nosotros mismos habría de ser nuestro fin principal (ya sabemos que los sentidos de una sola acción son infinitos, y los sinsentidos también).

   Qué pequeños ante el mar o las montañas, o el viento o la lluvia, o los bosques…, sólo unos ojos que miran con un gran ánimo de ver. Qué inmenso puede ser lo más diminuto.

 

________________
 
«TRAS EL NAUFRAGIO DE “DIÁLOGOS”»